Tras casi 15 años de que la Agencia de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés) prohibiera que el químico clorpirifos se use en los hogares, la agencia anunció ayer que está cerca de prohibir este pesticida neurotóxico para uso en campos agrícolas también. El anuncio se hizo tras una decisión reciente por parte de la corte de apelaciones donde exigía a la agencia que respondiera a una petición emitida en el 2007 donde se le pedía la prohibición del químico.

Los defensores del medio ambiente y de los trabajadores agrícolas que iniciaron la acción legal califican el anuncio como un paso importante en la dirección adecuada, y potencialmente con un mayor alcance si la agencia se compromete a prohibirlo totalmente el próximo año.  La EPA explica en su reporte a la corte:

“La EPA tiene la intención de otorgar la Petición para ser publicada en el Registro Federal a más tardar el 15 de abril del 2016, la cual es una norma propuesta de acuerdo a 21 U.S.C. sección 346a(d)(4)(A)(ii) para revocar todas las tolerancias de clorpirifos que respondan a las preocupaciones que se tienen sobre la calidad del agua en cuencas pequeñas de todo el país.”

“Al retirar todas las tolerancias de clorpirifos, la EPA estaría prohibiendo todos los usos de clorpirifos en los alimentos. Esto es precisamente lo que hemos estado buscando por años. Según las investigaciones de la misma EPA, se ha descubierto que el clorpirifos causa daño cerebral en los niños e intoxica a los trabajadores y las personas que se encuentren cerca,” dijo Patti Goldman, la abogada de Earthjustice que está llevando el caso. “Por fin la EPA está tomando pasos para proteger a los niños, los trabajadores y sus familias al vetar este pesticida tan dañino.”

En diciembre del 2014, la EPA finalmente aceptó los datos científicos que demostraban una correlación entre la exposición al clorpirifos y el daño cerebral en los menores, incluyendo un menor cociente intelectual, retrasos de desarrollo y pérdida de memoria. Por 15 años, la EPA ha estado permitiendo niveles de exposición mucho mayores que los niveles considerados dañinos para los niños. Como resultado, los grupos de defensores han seguido presionando para lograr mayores protecciones para los niños a nivel estatal y federal, hasta que la agencia fortalezca su compromiso con el veto.

El reporte que la EPA presentó a la corte menciona el daño a los trabajadores como una razón más para establecer la prohibición.

“Cada año, los trabajadores agrícolas y sus familias en comunidades rurales están siendo expuestos a clorpirifos, y la EPA está reconociendo finalmente el daño que esta exposición puede llegar a causar. Ya era hora que la EPA hiciera caso a los descubrimientos científicos y tomara acción,” dijo la Dra. Margaret Reeves, Científica Jefe de la Red de Acción contra los Pesticidas (Pesticide Action Network). “Un veto garantiza que tanto trabajadores como familias en comunidades rurales se sientan protegidos contra este peligroso pesticida que se dispersa tan fácilmente.”

“Los tipos de daño cerebral que el clorpirifos causa son una pesadilla para cualquier padre de familia: reducciones en cociente intelectual menor, desórdenes de atención, retrasos en el desarrollo,” dijo Jennifer Sass, científica jefe del Consejo para la Defensa de los Recursos Naturales (Natural Resources Defense Council). “La EPA debe actuar para detener la exposición a este pesticida y proteger los cerebros de los niños de este tipo de daño tan atroz.”

“Si la EPA llega a vetar el clorpirifos, es un paso hacia la justicia ambiental,” dijo Virginia Ruiz del grupo Justicia Campesina (Farmworker Justice). “Los trabajadores del campo y sus familias, que son predominantemente pobres y en su mayoría latinos, cargan con el peso de las intoxicaciones y el rocío tóxico.”

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