En Una Gran Victoria Para El Clima, New York Rechaza Ducto Para Gas Fracturado
En Albany, el gobernador Andrew Cuomo anunció que su administración estaba negando un permiso clave para la construcción de un proyecto masivo de infraestructura para combustibles fósiles—un ducto para gas fracturado de 125 millas de longitud y conocido como Constitution.
Esta página fue publicada hace 8 años. Encuentre lo último sobre el trabajo de Earthjustice.
El 22 de abril, el Día de la Tierra, líderes mundiales de más de 170 países se reunieron en la ciudad de Nueva York para firmar el histórico tratado climático de Paris. Con sus firmas, comprometieron a sus gobiernos a ponerle un límite al aumento de la temperatura mundial a 1.5 grados, el nivel que según los científicos es crucial para librarnos de los peores impactos del cambio climático.
El llevar una firma estampada en un pedazo de papel a acciones verdaderas tomará valentía y liderazgo de parte de todos nosotros. Por suerte, ambos se vieron representados este Día de la Tierra cuando a 150 millas del Río Hudson, en Albany, el gobernador Andrew Cuomo anunció que su administración estaba negando un permiso clave para la construcción de un proyecto masivo de infraestructura para combustibles fósiles—un ducto para gas fracturado de 125 millas de longitud y conocido como Constitution. El permiso rechazado es otra prueba de la fuerza de los activistas anti-fracking, quienes libraron una cruenta batalla contra este proyecto que hubiera impulsado la fracturación de Marcellus Shale en Pennsylvania. Este ha sido el segundo proyecto de infraestructura para la fracturación de un gasoducto en tres meses que ha sido rechazado gracias a los activistas anti-fracking de Nueva York. Y fue el segundo gasoducto en el noroeste que se cayó esa misma semana. El miércoles 20 de abril, Kinder Morgan anunció que estaba abandonando planes de construir el controversial gasoducto Northeast Energy Direct.
A pesar de estas victorias, aún existen serias dificultades, concretamente una preocupante negativa por parte de los oficiales de la Comisión Federal Reguladora de la Energía (FERC, por sus siglas en inglés) de calcular el impacto ecológico de los proyectos que aprueba.
Earthjustice ha estado luchando en los tribunales contra el proyecto del gasoducto Constitution, representando a los grupos ambientalistas Riverkeeper, Catskill Mountainkeeper, Clean Air Council, Delaware-Otsego Audubon Society, Delaware Riverkeeper Network y los capítulos Pennsylvania y Atlantic del Sierra Club en los procedimientos ante FERC.
En marzo, a pesar de la demanda hecha por Earthjustice, la FERC le dio luz verde a los constructores del gasoducto de talar de manera mecánica 20 millas de árboles a lo largo de la ruta planeada para el gasoducto justo en medio de Pennsylvania, ubicadas en gran parte en propiedad privada y sin la aprobación de los dueños de las tierras. En los documentos del tribunal, señalamos que esto era prematuro e ilegal. El gasoducto estaba lejos de ser un trato cerrado: el estado de Nueva York ni siquiera había aceptado la autorización de un permiso y sin éste, no se podría construir un gasoducto.
Pero con la aprobación de FERC, acompañados de U.S. Marshalls armados, hombres con sierras cortaron los árboles a lo largo de la ruta del gasoducto, incluyendo los que estaban dentro de la propiedad de la familia Holleran. Cada año, a finales del invierno, la familia Holleran hace perforaciones a los árboles de arce para extraer la savia del tronco para hervirla y hacer jarabe de arce. FERC ni siquiera aceptó retrasar la tala de los árboles para permitirle a los Hollerans completar una última recogida de savia.
Hemos retado a FERC en varios proyectos de infraestructura para combustibles fósiles, incluyendo el gasoducto MARC I en Pennsylvania y la terminal Dominion Cove Point LNG en Maryland. La agencia ha colocado su sello de aprobación por encima de la oposición de comunidades, sin ni siquiera requerir cálculos completos de los impactos al medio ambiente. Dado el hecho que los fondos de FERC están vinculados a tarifas pagadas por los que obtienen los permisos, los críticos han comenzado a cuestionar si existe un conflicto de intereses.
Como le dijo Moneen Nasmith, de Earthjustice, a los reporteros en respuesta a la firma del acuerdo climático de Paris, “Los líderes mundiales y nuestros líderes en el estado de Nueva York estamos haciendo lo necesario. Desafortunadamente, nuestros esfuerzos están siendo afectados por agencias inescrupulosas como la Comisión Federal Reguladora de la Energía la cual no está cumpliendo con su propósito de evaluar los impactos climáticos de los proyectos masivos de infraestructura para combustibles fósiles que aprueba. FERC es una agencia atípica que con cada día que pasa se expone más, al estar en contradicción con sus semejantes.”
“Ya es hora de que los facilitadores y apologistas de la industria de combustibles fósiles se hagan a un lado y permitan que el resto de nosotros continúe la labor necesaria para resolver la crisis climática y lograr la transición de nuestra sociedad a 100 por ciento energía renovable.”
From 2007–2018, Kathleen partnered with clean energy coalitions and grassroots organizations, empowered communities to fight against fracking, and worked with the Policy & Legislation team to have their messages heard by legislators.
Established in 2008, Earthjustice’s Northeast Office, located in New York City, is at the forefront of issues at the intersection of energy, environmental health, and social justice.