A Fight Worth Fighting: Waste Incineration in Puerto Rico
The proposed construction of a 2,100-ton-per-day municipal solid waste incinerator on the north coast of Puerto Rico is involving communities in a fight to demonstrate that waste incineration is a bad idea for the island.

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Aside from fiscal and economic perils, the people of Puerto Rico must confront yet another threat: the proposed construction of a 2,100-ton-per-day municipal solid waste (MSW) incinerator in the north coast municipality of Arecibo.
Although this would be the first MSW incinerator on the island, itās not the first time one has been proposed. Previous attempts to build incinerators in Puerto Rico in the 1980s and early 2000s were defeated because of community and citizen action.Ā
The company behind the Arecibo incinerator, Energy Answers, also built an Albany, New York incinerator that was shut down in the 1990s after black soot from the waste facility ended up on the governorās front lawn.
The 2010 environmental impact statement (EIS) prepared by the Puerto Rico government to evaluate the incinerator used incorrect and outdated information on population growth, waste production, recycling objectives, emissions, water sources and health, environmental and economic impacts. Furthermore, the local EIS did not evaluate alternatives, did not adequately consider environmental justice issues and did not analyze sensitive environmental systems, including forests, wetland reserves and habitat for endangered species. The deficiencies of the local EIS were substantial, yet within 30 days it was approved through a process that made a mockery out of public participation.
Local opposition to the incinerator is rooted in the fact that Arecibo communities have suffered from environmental injustice for decades. Arecibo is the site of many polluting industrial activities, including a battery recycling operation, which resulted in Arecibo being declared a non-attainment zone by the U.S. EPA for exceeding limits on lead pollution in the air. Citizens are very aware of the health and environmental risks associated with the toxic ash and the emissions containing mercury, lead, cadmium and dioxins that would be produced by the incinerator, as well as nano-particles not currently regulated by EPA. They know that good health is not what comes out of an incineratorās chimney.
The incinerator would also require 2.1 million gallons of water a day that is currently recharging aquifers and wetlands. Given Puerto Ricoās present droughtāand even with no droughtāthis would commit water supplies vital to the people and environment of Puerto Rico to the incinerator instead. The incinerator would also crush local initiatives aimed at increasing recycling rates (currently at 14 percent, on average) and adopting job-creating, zero waste practices.
Local mayors are opposed to the project. Municipalities have legal authority over waste collection and disposal on the island. However, the Puerto Rico government signed a contract with Energy Answers that would force municipalities to take their trash to the incinerator. Municipalities have already said they will not comply because of the increased tipping fees and transportation costs (an estimated increase of 38 percent) and because it would affect local recycling efforts. Mayors have already indicated that they will challenge in court any attempt to force them to take their trash to the incinerator. Their frail budgets cannot handle the added costs, but the project is not viable without a guaranteed waste flow from municipalities.
The project has also raised concerns for Congressmen Luis GutiĆ©rrez, Nydia VelĆ”zquez and JosĆ© Serrano, since Energy Answers is asking the U.S. Department of Agricultureās (USDA) Rural Utilities Services (RUS) for federal financing to build its project. All three have voiced their opposition to the project because of the associated health, environmental and economic impacts. They have written to USDA Secretary Tom Vilsack demanding that Energy Answersā financing request be denied.
RUS recently published a draft EIS for the incinerator that raises many concerns about how the agency is evaluating the project. The RUSās draft references incorrect information from the 2010 local EIS done by the Puerto Rico government. RUS has not conducted its own studies and is relying on false and outdated information. Furthermore, it is incomprehensible that RUS would consider a major municipal waste incineration project that would contribute almost one million tons of CO2 per year to the atmosphere in clear contradiction of Secretary Vilsackās climate change policy to reduce CO2 emissions. Earthjustice is representing five groups in submitting their comments on the draft EIS; Cambio is an ally in this effort.
An objective analysis of correct and updated data makes it obvious that the Arecibo incinerator is undesirable and not economically viable and would result in negative impacts to human health, the environment and the economy. Sign our petition to RUS and help in this important fight against the Arecibo incinerator.
This post is part of a series celebrating Hispanic Heritage Month. Earthjustice is serving as a co-presenter at the 2015Ā Americas Latino Eco Festival, a multicultural event that aims to unite Latino leaders in the environmental movement. The festival will take place October 15 through 17 in Denver, Colorado.
Una Lucha que Vale la Pena: Incineración de Residuos en Puerto Rico
Esta es una publicación de blog de la invitada especial Ingrid Vila, fundadora de Cambio y antigua Secretaria de Gobernación de Puerto Rico.Ā
AdemĆ”s de los riesgos fiscales y económicos, el pueblo de Puerto Rico debe enfrentarse a otra amenaza: la propuesta de construcción de un incinerador municipal de residuos sólidos (o MSW, por sus siglas en inglĆ©s) con una capacidad de 2,100 toneladas al dĆa en un municipio de la costa norte llamado Arecibo.
Aunque Ć©ste serĆa el primer incinerador MSW en la isla, no es la primera vez que se hace la propuesta. Previos intentos para instalar incineradores en Puerto Rico en los ochentas y a principios de la dĆ©cada de los 2000 fueron rechazados por acciones ciudadanas y comunitarias.Ā
La empresa detrĆ”s del incinerador en Arecibo, Energy Answers, tambiĆ©n construyó un incinerador en Albany, Nueva York que fue clausurado en los 90s despuĆ©s de que se encontrara hollĆn proveniente de sus instalaciones en el cĆ©sped de la casa oficial del gobernador.
La declaración del impacto ambiental (o EIS, por sus siglas en inglĆ©s) que el gobierno de Puerto Rico preparó en el 2010 para evaluar al incinerador, uso información incorrecta y obsoleta sobre el crecimiento de la población, generación de residuos, objetivos de reciclaje, emisiones, fuentes de agua e impactos en la salud, el medio ambiente y la economĆa. Aparte, el estudio EIS local no evaluó alternativas, no consideró adecuadamente los problemas de justicia ambiental y no analizó sistemas ambientales delicados, que incluyen bosques, reservas de humedales y hĆ”bitat para especies en peligro. Las deficiencias del estudio EIS local fueron sustanciales, sin embargo fue aprobado en un perĆodo de 30 dĆas a travĆ©s de un proceso que se burló de la participación del pĆŗblico.
La oposición de la población local hacia el incinerador estĆ” basada en el hecho que las comunidades de Arecibo han sufrido de injusticia ambiental por dĆ©cadas. Arecibo es la sede de muchas actividades industriales contaminantes, incluyendo una operación de reciclaje de baterĆas, la cual causó que Arecibo fuera declarada zona de incumplimiento por la Agencia Federal de Protección al Medio Ambiente (EPA) por exceder los lĆmites de contaminación del aire por plomo. Los ciudadanos estĆ”n muy conscientes de los riesgos a su salud y al medio ambiente asociados con las cenizas tóxicas y las emisiones con contenido de mercurio, plomo,Ā cadmio y dioxinas que serĆan emitidas por el incinerador, al igual que las nano-partĆculas que no estĆ”n reguladas por la EPA actualmente. Saben que por la chimenea de un incinerador lo que brota no es precisamente la buena salud.
El incinerador tambiĆ©n requiere de 2.1 millones de galones de agua al dĆa que ahorita se encuentran recargando acuĆferos y humedales. Debemos tomar en cuenta que la sequĆa que aqueja a Puerto Rico en estos momentosāe incluso sin sequĆaā le quitarĆa reservas de agua vitales para la gente y el medio ambiente de Puerto Rico para dĆ”rselas al incinerador. El incinerador tambiĆ©n reprimirĆa iniciativas locales para aumentar las tasas de reciclaje (actualmente en un 14 por ciento, en promedio) y de adopción de procesos de emisión cero que ayudan a crear empleos.
Los alcaldes de la zona se oponen al proyecto. Los municipios tienen autoridad legal sobre la recolección y eliminación de residuos en la isla. Aun asĆ, el gobierno de Puerto Rico firmó un contrato con Energy Answers que obligarĆa a los municipios a acarrear sus residuos al incinerador. Las municipalidades ya dijeron que ellos no darĆ”n cumplimiento a lo pactado por el aumento a las cuotas de descarga y los costos de transporte (un incremento calculado en un 38 por ciento) y porque afectarĆa esfuerzos locales de reciclaje. Los alcaldes ya dijeron que van a impugnar en los tribunales cualquier intento que los obligue a llevar la basura de sus comunidades al incinerador. Sus presupuestos raquĆticos no aguantan los costos adicionales, pero el proyecto no es viable sin la garantĆa de un flujo de desechos proveniente de los municipios.
El proyecto tambiĆ©n le ha generado inquietudes a los Congresistas Luis GutiĆ©rrez, Nydia VelĆ”zquez y JosĆ© Serrano, ya que Energy Answers estĆ” pidiendo financiamiento al Servicio Rural de CompaƱĆas ElĆ©ctricas (o RUS, por sus siglas en inglĆ©s) del Departamento Federal de Agricultura (USDA) para construir su proyecto. Los tres han expresado su oposición al proyecto por el alto impacto ambiental, económico y a la salud. Le han escrito al Secretario de la USDA Tom Vilsack pidiĆ©ndole que niegue la petición de financiamiento que Energy Answers solicitó.
RUS recientemente publicó un borrador del estudio de impacto ambiental que el incinerador causarĆa y que suscita muchas interrogantes sobre la manera en que la agencia estĆ” evaluando el proyecto. El borrador que hizo RUS usa información incorrecta con datos de un estudio de impacto ambiental realizado en 2010 por el gobierno de Puerto Rico. RUS no ha hecho sus propios estudios y se basó en información falsa y obsoleta. AdemĆ”s no se entiende por quĆ© RUS aceptó un proyecto municipal de incineración de residuos sólidos de tal magnitud que emitirĆa a la atmósfera casi un millón de toneladas de CO2 Ā al aƱo en una clara contradicción a la polĆtica sobre cambio climĆ”tico del Secretario Vilsack, que busca reducir las emisiones del dióxido de carbono. Earthjustice estĆ” representando legalmente a cinco grupos que han presentado sus comentarios al borrador del impacto ambiental EIS; Cambio es un aliado en este esfuerzo.
Un anĆ”lisis objetivo de los datos corregidos y actualizados, demuestra que el incinerador de Arecibo es arriesgado, no es viable económicamente, y tendrĆa resultados negativos para la salud humana, el medio ambiente y la economĆa. Firma nuestra petición a RUS y ayĆŗdanos en esta importante lucha contra el incinerador Arecibo.
Esta contribución es parte de una serie que celebra el Mes de la Herencia Hispana. Earthjustice va a servir como co-presentador en elĀ Americas Latino Eco Festival, 2015 un evento multicultural que busca unir a lĆderes latinos del movimiento ambientalista. El festival se va a llevar a cabo del 15 al 17 de octubre en Denver, Colorado.
Ingrid Vila is the founder of Cambio and former Chief of Staff of Puerto Rico.