Hogares sin luz en Puerto Rico reciben energía solar

Cuando el huracán María comenzó a alejarse de Puerto Rico tras asolar la isla, David Ortiz salió a la calle con un machete y un corazón humanitario.

El huracán María volcó las vidas de muchos residentes de Puerto Rico como Heydee Pérez y su hijo, Yenel Calera.
El huracán María volcó las vidas de muchos residentes de Puerto Rico como Heydee Pérez y su hijo, Yenel Calera. (CAROLYN COLE / LOS ANGELES TIMES VIA GETTY IMAGES)

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Cuando el huracán María comenzó a alejarse de Puerto Rico tras asolar la isla, David Ortiz salió a la calle con un machete y un corazón humanitario.

“Salimos con machete en mano y comenzamos a limpiar árboles [derribados] para sacar a personas mayores, mujeres y niños”, dijo Ortiz, director de la oficina de El Puente en Puerto Rico. “De lo contrario no hubieran podido salir de sus casas”.

El Puente, fundado hace 35 años en Williamsburg, Brooklyn, hace trabajo de empoderamiento comunitario, enfocándose en salud, educación, justicia ambiental y las artes.

“Ha sido esta actitud de ‘sí se puede y se tiene que hacer’ la que ha mantenido a los puertorriqueños sobreviviendo en la isla”, dijo Ortiz, “a pesar de la lenta respuesta federal”. Y es esta actitud de hazlo tú mismo lo que llevó a varias organizaciones ecologistas en Puerto Rico y los Estados Unidos, incluido El Puente, a activar un proyecto para llevar lámparas solares a quienes más las necesitan.

Hasta ahora, la coalición ha distribuido 6,000 lámparas solares entre el 31 por ciento de puertorriqueños que aún no tienen electricidad. Earthjustice, socio de El Puente en la promoción de energías renovables en la isla, donó $30,000 dólares para la causa.

Ortiz ha movilizado a voluntarios a usar sus propios automóviles y gasolina e ir de puerta en puerta,  buscando comunidades donde llevarle lámparas a sus residentes; principalmente personas de la tercera edad, gente con discapacidades y familias con niños.

Ortiz duró 30 minutos convenciendo a una mujer cercana a los 90 años, temerosa y con andador, para que abriera la puerta de su jardín y aceptara una lámpara y un tutorial para usarla. Su familia le había dicho que no hablara con desconocidos, así que Ortiz dejó la lámpara junto a la puerta y dijo que alguien más la tomaría; entonces la señora bajó su guardia y abrió la puerta. “Sabía que la necesitaba”, dijo Ortiz.

A Ortiz le ha sido profundamente conmovedor ver la diferencia que hacen estas lámparas en la vida de las personas. Una anciana con Alzheimer, por ejemplo, pudo ver la cena que estaba comiendo por primera vez desde la tormenta.

Y es que, además de iluminar una habitación por la noche, las lámparas también sirven como cargadores de teléfono y radios. Ahora mismo los teléfonos celulares y la radio, son la única manera de mantenerse en contacto con familiares y tener información de los esfuerzo de recuperación del país.

El propio Ortiz pasó la primera noche del huracán María resguardado en su casa de San Juan junto a su esposa e hija de 5 años, intercambiando toallas y ropa vieja para absorber el agua que entraba por los marcos de las ventanas.

Por un momento, dijo Ortiz, tanto él y su esposa de verdad pedían que no fuera esa la última vez que estuvieran juntos. “Fue aterrador”, dijo Ortiz. “Cuando caía la lluvia golpeaba con tanta fuerza que parecía la nieve de una tormenta”.

Cuando aminoró la violencia, todo mundo comenzó inmediatamente a ayudarse entre sí. La red eléctrica local había colapsado y muchas casas habían sido destruidas. Había árboles caídos que bloqueaban calles y encerraban todavía a muchos en sus casas.

“Sabías que la ayuda no vendría pronto”, dijo Ortiz. “Simplemente no podías esperar  a que el gobierno local o federal hiciera algo”.

Las lámparas se encienden después de algunas horas de carga y ofrecen energía hasta por tres días, dijo Ortiz, y han ayudado de manera increíble.

Los grupos con sede en Estados Unidos que colaboran con El Puente son el Instituto de Análisis Económico y Financiero de Energía (IEEFA, por sus siglas en inglés) y el Instituto de Competitividad y Economía Sostenible. También participan varios grupos basados en Puerto Rico, incluyendo SER de Puerto Rico, el Instituto Psicopedagógico, Centro Para Puerto Rico, Proyecto Enlace, Proyecto Caras y Centros Sor Isolina Ferré.

La directora ejecutiva del IEEFA, Sandy Buchanan, dijo que el grupo de especialistas basados en Ohio ayudó a desarrollar la idea gracias a las aportaciones de sus socios en Puerto Rico. Primero consideraron distribuir generadores solares, pero eran mucho más costosos, así que instalaron faroles solares fabricados por la empresa con sede en Haití, Ekotek Energy, quienes los vendieron con descuento como apoyo al proyecto.

Buchanan dijo que las lámparas de Ekotek fueron superiores a otras debido a la cantidad de energía que pueden almacenar y su rápida carga.

Este proyecto también apoyó los objetivos de estos grupos para apoyar y ampliar el uso de la energía renovable en Puerto Rico.

“Es una forma de ayudar durante la emergencia inmediata y de encontrar formas para resolver algunos problemas básico con energías renovables”, dijo Ortiz.

Residentes de Puerto Rico que necesiten una lámpara solar pueden comunicarse con Ortiz en Dortiz@elpuente.us

Haga clic aquí para donar a El Puente.

Based in Washington, D.C., Keith is the National Communications Strategist for Partnerships and Intersectional Justice.