La Administración Trump Abandona la Acción Climática, Pero La Crisis Continúa

A solo horas de su regreso al cargo, el presidente Donald Trump decretó una serie de acciones que despojan a Estados Unidos de su liderazgo climático, tanto en su propio territorio como en el extranjero. Retiró al país del Acuerdo Climático de París, presionó para expandir en gran medida la producción de combustibles fósiles y atacó la energía limpia.

Como la principal organización de derecho ambiental del país, Earthjustice está preparada para exigirle cuentas al presidente Trump y a los miembros del Congreso por alejarse de la acción climática en este crucial momento.

“Le guste o no al presidente Trump, es un mandatario climático, que lidera en tiempos en que nuestro planeta se está calentando a una velocidad récord por la quema de combustibles fósiles. Asimismo, los fenómenos meteorológicos extremos están causando muertes, destrucción y llevando a la bancarrota a nuestras comunidades”, dijo la presidenta de Earthjustice, Abigail Dillen. “Dar marcha atrás en el liderazgo climático no impedirá que Earthjustice luche por el futuro de energía limpia que necesitamos, incluso si esta administración no lo hace”.

Dónde hemos logrado avances en materia climática y cómo los defenderemos

• Limpieza del sector energético:
  • El progreso: El sector energético representa una cuarta parte de las emisiones totales de gases de efecto invernadero de Estados Unidos y contribuye a muchas otras formas de contaminación. En 2024, el expresidente Biden aprobó un conjunto de normas de reducción de la contaminación para centrales eléctricas y empresas de petróleo y gas. Estas incluían límites a las emisiones de carbono y metano. Respecto a las cenizas tóxicas de carbón, se adoptaron medidas para su limpieza y normas más estrictas para las aguas residuales.
  • Cómo lo defenderemos: En su primer día de mandato, el presidente Trump mediante una orden ejecutiva solicitó a los jefes de las agencias que revisaran cualquier norma que pudiera suponer una “carga indebida” para los combustibles fósiles. Estamos preparados para luchar por estas regulaciones críticas y venimos armados con experiencia: demandamos a la última administración Trump cuando intentó reducir los estándares de metano para la industria del petróleo y el gas, debilitar las protecciones contra la peligrosa contaminación por cenizas de carbón y desmantelar los estándares de los automóviles limpios.
• Objetivos climáticos ambiciosos:
  • El progreso: Estados Unidos ha establecido nuevos y contundentes objetivos para reducir su contaminación por gases de efecto invernadero en la próxima década. Antes de culminar su periodo, el presidente Biden se comprometió a reducir la contaminación climática, al menos en un 61% para 2035, en virtud del Acuerdo de París.
  • Cómo lo defenderemos: Trump firmó una orden ejecutiva para retirar a Estados Unidos del Acuerdo de París, como lo hizo en 2016. Tal como lo hicimos en aquel momento, intensificaremos nuestro trabajo a nivel estatal e internacional, así como en las comisiones de servicios públicos, para seguir logrando avances mientras defendemos el progreso a nivel federal.
• Inversiones históricas en energía limpia:
  • El progreso: En 2022, Estados Unidos aprobó la mayor inversión federal en energía limpia en la historia del país. La Ley de Reducción de la Inflación (IRA, por sus siglas en inglés) ya ha creado más de 300 mil puestos de trabajo y ha ayudado a los estadounidenses a ahorrar miles de millones de dólares en vehículos eléctricos, bombas de calor, paneles solares y otros electrodomésticos energéticamente eficientes.
  • Cómo lo defenderemos: Una nueva orden ejecutiva de Trump exige a todas las agencias que suspendan el desembolso de los fondos asignados a través de la IRA. Los miembros del equipo de transición de Trump también han dicho que trabajarán con el Congreso controlado por los republicanos para revertir los créditos fiscales al consumidor en el IRA. Lucharemos por estas políticas que han desbloqueado el acceso a hogares y vidas más saludables y energéticamente eficientes.

La agenda de combustibles fósiles de la administración Trump

• Distracción: el presidente Trump declaró una “emergencia energética” como justificación para expandir la producción de petróleo, gas y carbón en tierras públicas sensibles, particularmente en Alaska. Este concepto sirve para distraer la atención de la crisis climática, que es impulsada por la quema de combustibles fósiles. También ignora el hecho de que Estados Unidos ya es el productor número uno de petróleo y gas metano.
• Exportaciones costosas: Estados Unidos también es el principal exportador mundial de gas natural licuado (GNL). Una acción ejecutiva al comienzo de este nuevo mandato exigió reiniciar las revisiones de permisos para nuevas terminales de exportación de GNL. Si la administración amplía las exportaciones de GNL, los hogares estadounidenses verán precios elevados en sus facturas de gas y electricidad — hasta $122,54 al año en promedio para 2050, según una investigación reciente del Departamento de Energía.
• Enriquecimiento de las compañías petroleras: “La única emergencia energética en los EE. UU. es la falta de una transición lo suficientemente rápida hacia la energía limpia”, dijo Abigail Dillen, presidenta de Earthjustice. “La agenda de ‘dominio’ energético tiene que ver con una sola cosa: enriquecer a las compañías de petróleo y gas. No hará que la energía sea asequible para los estadounidenses. Causará mayores desastres climáticos que están devastando las vidas de las personas alrededor del país y del mundo. Mientras Los Ángeles arde, las declaraciones de emergencia que necesitamos son aquellas que acelerarían las soluciones energéticas y ayudarían a las personas que lo han perdido todo”.

No podemos darnos el lujo de abandonar la acción climática

• Los plazos climáticos no pueden esperar: a medida que aumentan las temperaturas globales, los fenómenos meteorológicos extremos y mortales se están volviendo más comunes. En septiembre de 2024, el huracán Helene provocó inundaciones históricas en el sureste de Estados Unidos, matando al menos a 121 personas y dejando a millones sin electricidad. Este enero, las comunidades de Los Ángeles han sido devastadas por múltiples incendios forestales intensificados por el cambio climático.
• El costo del cambio climático: estos desastres climáticos traen un alto precio. Se estima que el huracán Helene alcanzó los 60 mil millones de dólares solo en Carolina del Norte, mientras que se proyecta que los incendios de Los Ángeles que asolan el sur de California costarán hasta 150 mil millones de dólares — y seguirán aumentando. Los propietarios de viviendas ven cómo las primas de seguro aumentan un 33% entre 2020 y 2023, o que sus pólizas se cancelan por completo.
• La gente espera que sus funcionarios electos cumplan con los principios básicos de salud y seguridad. Los avances logrados en materia de acción climática en los últimos cuatro años están profundamente arraigados y cuentan con altos índices de popularidad. Sin importar lo que nos depare, no dejaremos de luchar para eliminar gradualmente las emisiones que calientan el planeta, catalizar una transición energética limpia justa y equitativa, y proteger a las comunidades del desastre climático.