Nueva Orleans, LA —

Hoy, la Oficina de Administración de Energía Oceánica (BOEM, por sus siglas en inglés) llevará a cabo una de las ofertas de arrendamiento en alta mar más grandes en la historia de los EE.UU. El llamado “Lease Sale 259” ofrecerá casi todas las áreas disponibles en arrendamiento en el oeste y centro del Golfo de México, lo que podría resultar en la producción de más de mil millones de barriles de petróleo y 4 billones de pies cúbicos de gas natural en los próximos 50 años.

A modo de comparación, se espera que el controvertido proyecto Willow recientemente aprobado en el Ártico de Alaska produzca 600 millones de barriles de petróleo. La oferta de arrendamiento, que el público puede ver a partir de las 9 a.m. CT, en Nueva Orleans, se incluyó en una disposición de la Ley de Reducción de la Inflación (IRA), que requiere que BOEM realice la Oferta de Arrendamiento 259 antes del 31 de marzo de 2023. Si bien el IRA ordena al BOEM que realice esta oferta, no requiere que un área tan vasta sea subastada a la industria, ni exime la venta de las leyes existentes para la protección de las personas y el medio ambiente, incluida la Ley de Política Ambiental Nacional (NEPA).

Las compañías petroleras, que han obtenido ganancias extraordinarias durante el último año derivadas de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, están bien posicionadas para participar en esta oferta. La comunidad del Golfo y los grupos ambientalistas presentaron una impugnación legal ante un tribunal federal al Lease Sale 259 del Departamento del Interior (DOI) a principios de mes. La demanda señala que el DOI no consideró los peligros para la salud que esta oferta en alta mar causará para las comunidades del Golfo, ni los graves impactos climáticos de una nueva fuente tan masiva de desarrollo de combustibles fósiles ni la amenaza que la vida marina en peligro de extinción enfrentaría.

Con el alcance atroz e innecesario de Lease Sale 259, la administración Biden contradice su compromiso de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y la transición a la energía limpia. La decisión de ofrecer casi todo el Golfo para explotación petrolífera sigue a la aprobación de la misma administración del proyecto Willow de ConocoPhillips en Alaska, el cual encontró férreas oposiciones de millones de personas que pidieron detener esta bomba de carbono debido a sus efectos sobre el cambio climático.

Recientemente, las Naciones Unidas publicaron su último informe del IPCC, que enfatiza la necesidad vital de acelerar la eliminación gradual de los combustibles fósiles alrededor del mundo. El secretario general de la ONU, António Guterres, calificó el informe como una “guía práctica para desactivar la bomba de relojería climática” y “una guía de supervivencia para la humanidad”. El informe subrayó que solo tendremos siete años para hacer cambios significativos, en tanto que el “Lease Sale 259” afianzará la extracción de combustibles fósiles en las aguas del Golfo durante el próximo medio siglo.

La oferta se llevará a cabo semanas antes del 13.º aniversario del desastre de Deepwater Horizon BP. Si bien los derrames de petróleo siguen siendo una fuente perpetua de preocupación a raíz de ese trágico evento, la probabilidad de que el cambio climático cause huracanes más poderosos solo aumenta el riesgo de futuros desastres de perforación en aguas profundas.

El abogado de Earthjustice, George Torgun, hizo la siguiente declaración sobre la oferta:

“El alcance excesivo e imprudente de esta oferta demuestra cuán necesario es reformar nuestro programa federal. La administración Biden no solamente está a punto de celebrar una oferta que está en la orilla opuesta de la ley, sino también se rinde a una industria rica en utilidades en detrimento del bienestar de las comunidades del Golfo, los ecosistemas vitales y nuestros objetivos climáticos urgentes”.