Tyson Foods Acepta Dejar de Hacer Afirmaciones sobre ‘Carne de Cero Emisiones Netas’ y ‘Carne de Res Climáticamente Inteligente’
La demanda alega que Tyson Foods afirmó falsamente que alcanzaría la neutralidad de carbono para 2050 y comercializó sus productos de carne industrial como “climáticamente inteligentes”
Contacto de Prensa
Robert Valencia, rvalencia@earthjustice.org
El Grupo de Trabajo Ambiental (EWG, por sus siglas en inglés) llegó a un acuerdo extrajudicial en la demanda por lavado de imagen verde (greenwashing) que interpuso contra Tyson Foods en septiembre de 2024. La demanda alegaba que las afirmaciones de Tyson Foods sobre alcanzar la neutralidad de carbono para 2050 o vender carne de res “climáticamente inteligente” no estaban respaldadas por acciones suficientes para lograr estos objetivos prácticamente imposibles.
El acuerdo estipula que Tyson dejará de hacer estas afirmaciones ambientales y no podrá realizar nuevas afirmaciones relacionadas durante un período de cinco años a partir de la fecha del acuerdo, a menos que un experto concluya que están suficientemente fundamentadas.
Este acuerdo se suma al reciente acuerdo alcanzado entre la Fiscalía General de Nueva York y JBS USA, que también se comprometió a dejar de hacer afirmaciones infundadas sobre alcanzar la neutralidad de carbono . Dado que JBS y Tyson producen juntas cerca del 50 % de la carne de res que se consume en Estados Unidos, estos resultados representan un avance significativo en los esfuerzos por proteger a los consumidores de las declaraciones falsas y engañosas de las mayores empresas cárnicas.
EWG está representada por Animal Legal Defense Fund (ALDF), Earthjustice, Edelson PC y FarmSTAND en la demanda presentada en virtud de la Ley de Procedimientos de Protección al Consumidor del Distrito de Columbia (CPPA) en el Tribunal Superior de D.C.
“Este acuerdo reafirma el principio de que los consumidores merecen honestidad y rendición de cuentas por parte de las corporaciones que dan forma a nuestro sistema alimentario”, declaró Caroline Leary, asesora legal y directora de operaciones de EWG. «El resultado deja claro que los compromisos climáticos corporativos deben ser transparentes, verificables y estar basados en un cambio real”.
“Este acuerdo debería ser una clara advertencia para que los consumidores desconfíen de las grandes productoras de carne de res que comercializan sus productos como ‘respetuosos con el clima’”, declaró Carrie Apfel, subdirectora legal del programa de Alimentación y Agricultura Sostenibles de Earthjustice. “La producción industrial de carne de res emite enormes cantidades de gases de efecto invernadero en cada etapa del proceso. Lograr reducciones significativas de emisiones a esta escala industrial requeriría que las corporaciones realizaran cambios transparentes y transformadores, algo que, según alegamos, Tyson no ha demostrado”.
“Este acuerdo representa un hito importante para los defensores y consumidores que exigen honestidad en la publicidad relacionada con el clima”, declaró Amanda Howell, abogada principal de ALDF. “Tyson Foods, la segunda mayor empresa cárnica del mundo, se ha comprometido a dejar de hacer afirmaciones sobre el clima y las emisiones a menos que dichas afirmaciones sean respaldadas por un experto independiente mediante ciencia creíble, y un plan real y viable. ALDF seguirá trabajando para garantizar que los consumidores preocupados por la crisis climática, la sostenibilidad y los impactos ambientales nocivos de la ganadería tengan acceso a información veraz y no engañosa”.
“La resolución de hoy marca un punto de inflexión crucial en la lucha contra el lavado de imagen verde del cambio climático”, declaró Kelsey Eberly, abogada principal de FarmSTAND . “Tyson Foods es el segundo mayor productor de carne y aves de corral del mundo, controla una quinta parte de la producción nacional de carne de res, cerdo y pollo, y se estima que genera casi tanta contaminación por metano como las grandes petroleras”.
Eberly agregó, “Y ahora, está retractándose de sus afirmaciones climáticas. Con las políticas pro-clima enfrentando ataques existenciales, acciones legales como esta son cada vez más importantes para concientizar a los consumidores sobre el enorme impacto que conglomerados como Tyson tienen en nuestro clima”.
Realidad de la producción industrial de carne de res
La producción industrial de carne genera enormes cantidades de emisiones que contribuyen al calentamiento global en cada etapa del proceso. Tan solo Tyson Foods emite cantidades de gases de efecto invernadero (GEI) superiores a las de Austria o Grecia. Su producción de carne de res es responsable del 85 % de las emisiones de la compañía.
En su denuncia, EWG alegó que los estudios demuestran que el metano y el óxido nitroso emitidos por la producción intensiva de carne vacuna de Tyson no pueden eliminarse con la tecnología actual ni con la prevista. La denuncia de EWG alegaba que actualmente es imposible para Tyson eliminar las emisiones entéricas sin eliminar el propio ganado, lo que hace que las afirmaciones de “cero emisiones netas” o “responsabilidad climática” sean engañosas.
Debido a su sistema digestivo rumiante, el ganado bovino exhala grandes cantidades de metano, un gas de efecto invernadero (GEI) más de 80 veces más potente que el dióxido de carbono en un periodo de 20 años, con cada respiración. En 2022, la fermentación entérica bovina representó aproximadamente el 18 % de las emisiones totales de metano en Estados Unidos. El ganado también produce grandes cantidades de desechos, y el manejo del estiércol libera tanto metano como óxido nitroso, un GEI casi 300 veces más potente que el dióxido de carbono.
Además, la producción de alimento para el ganado —generalmente monocultivos con alto contenido de fertilizantes— libera cantidades significativas de óxido nitroso. Finalmente, la deforestación y la degradación de las tierras destinadas al pastoreo y la producción de alimento liberan el carbono almacenado en los suelos nativos e impiden que la tierra secuestre carbono adicional (lo que se conoce como costo de oportunidad del carbono).
Los consumidores buscan cada vez más adquirir productos que sean mejores para el planeta. De hecho, la demanda señala que la propia Tyson reconoció que “un número creciente de consumidores está dispuesto a pagar más por carne de res y otros alimentos con menores emisiones de GEI [gases de efecto invernadero]”, que “los consumidores estarían dispuestos a pagar al menos un 24% más por opciones sostenibles y respetuosas con el medio ambiente en el comercio minorista” y que “la creciente preocupación por el cambio climático también podría afectar negativamente la demanda de nuestros productos debido a cambios en las preferencias de los consumidores”.
Con el fin de aprovechar la preferencia de los consumidores por opciones sostenibles, Tyson afirmó repetidamente en su sitio web y en comunicados de prensa durante casi cuatro años y medio que se comprometía a alcanzar las cero emisiones netas para 2050 y que vendía carne de res producida de forma sostenible. Tal como alega la demanda, a pesar de la enorme escala de la producción industrial de Tyson y sus emisiones de gases de efecto invernadero, la empresa ha tomado pocas medidas para cumplir con estos compromisos y no ha ofrecido ninguna prueba que respalde estas afirmaciones.
La denuncia sostiene que Tyson ha destinado menos del 0,1% de sus ingresos a iniciativas para reducir su impacto climático (principalmente en investigación): 50 millones de dólares de un total de ingresos anuales de aproximadamente 53 mil millones de dólares. Tyson invierte casi tres veces más en publicidad que en investigación.
Es la organización de derecho ambiental sin fines de lucro más importante del país. Desde nuestra fundación en 1971, nuestro litigio ha enfrentado a empresas con criminales niveles de contaminación y a instituciones gubernamentales, logrando un gran número de protecciones básicas para las personas y el planeta. Lea más acerca de Earthjustice.