El día de hoy, como ha sido reportado por el New York Times y otros medios de comunicación, la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) planea completar el destripamiento de los Estándares de Mercurio y Tóxicos del Aire (MATS, por sus siglas en inglés), que regula las emisiones tóxicas de las centrales eléctricas de carbón y petróleo. Desde su implementación en 2011, el MATS redujo drásticamente los niveles de mercurio y otros contaminantes en el aire que están relacionados con enfermedades respiratorias, enfermedades cardíacas y cáncer, entre otros impactos negativos en la salud. Se estima que el MATS ha salvado hasta 11 mil vidas cada año.

El anuncio se produce cuando el país se está recuperando del coronavirus, una enfermedad respiratoria que ha causado más de 20 mil muertes en Estados Unidos. Este mes, un estudio de la Universidad de Harvard, que utiliza datos de calidad del aire en 3.080 condados, encontró que las personas con coronavirus que viven en áreas con alto nivel de contaminación del aire tienen más probabilidades de morir a causa de la enfermedad. Asimismo, incluso una pequeña disminución de la exposición a las partículas en el aire a largo plazo se asoció con riesgos significativamente menores de muerte por el virus.

El administrador de la EPA, Andrew Wheeler, ex cabildero de la industria del carbón, retira los hallazgos de que es “apropiado y necesario” regular las peligrosas emisiones de estas plantas de energía mediante el uso de un nuevo análisis de costo-beneficio con “fallas profundas”, según los economistas. Borrar un análisis de costo-beneficio basado en la ciencia pone a las comunidades en riesgo cuando en la actualidad necesitan una mayor protección contra la contaminación del aire.

“El administrador Wheeler decidió poner en riesgo la vida y la salud de las personas que viven en los Estados Unidos. Wheeler, ex cabildero del carbón, descubrió que no era ‘apropiado’ que la EPA emitiera los Estándares de Mercurio y Tóxicos del Aire, a pesar de que el mercurio perjudica los cerebros en desarrollo de los menores”, dijo el abogado de Earthjustice, James Pew, quien ha liderado una batalla de 20 años para establecer dichas regulaciones. “Este hallazgo profundamente irresponsable busca sabotear las reglas, permitiendo que ex clientes de Wheeler, los donantes y aliados de la administración Trump pongan trabas legales. Si semejante sabotaje tiene éxito, las personas alrededor del país morirán innecesariamente cada año, literalmente luchando por respirar pero ahogándose hasta fallecer”.

El propio análisis de la EPA subraya los beneficios de estas regulaciones para la salud pública. Tales protecciones son más cruciales para salvar vidas durante pandemias como el COVID-19, como muestra el estudio de Harvard. 

Earthjustice planea demandar en respuesta a este ataque.

Lea este informe especial de Earthjustice para obtener más información sobre la historia y el impacto de MATS.

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